La importancia de activar hoy la “Lógica de lo positivo”.

Tomemos conciencia que un  estado de ánimo positivo no solo está asociado a la serenidad y la paz interior sino que además favorece la salud y prolonga la vida. 

Cuando una persona está anclada en el miedo, resentimientos, la ira o la angustia, los tipo de hormonas que se liberan en la sangre nos hacen daño.

Dado que las redes sociales muchas veces nos aplastan con datos negativos,  hipótesis no contrastadas, especulaciones poco documentadas y para las que  en ocasiones no estamos preparados para valorar. Tenemos que tener cuidado. 

En este sentido, es preciso que adoptemos algunas precauciones

1. Tomar consciencia de los pensamientos

• Sabemos que la tendencia natural de la mente es a distraerse, incluso en el trabajo o en las actividades académicas.

• Pero incluso en una situación como la actual es fácil que nos quedemos centrados en pensamientos negativos 

• Escuchar nuestros pensamientos y darles su lugar nos ayudará a desmitificar falsas creencias o ideas sin sentido.

 2. Mantener el contacto social aún en medio del distanciamiento físico. 

• Evitemos en ese momento “efecto túnel” que nos lleva a la soledad. Conéctenos con nuestras personas queridas utilizando los medios digitales que tenemos a nuestro alcance, “reforcemos los vínculos”

 3. Trabajar en nuestra resiliencia

• Debemos construir nuestra capacidad de resistencia a través de nuestros propios pensamientos.

• Evitando ese sesgo negativo o fijándonos sólo en lo problemático que tenemos delante, olvidando todo lo demás. 

• Para ello debemos construir nuestra resilencia  y capacidad de afrontamiento:

(a) Enfocarnos en soluciones positivas que existen y están ahí tratando así de calmarnos y ver más allá de lo inmediato.

(b) Tomar un descanso (si está uno confinado, es el momento idóneo) y alejarse mentalmente de la situación problemática (hemos de evitar pensamientos del tipo: si hubiese/n hecho .. porque no nos da una explicación adecuada, dado que nos falta perspectiva temporal).

(c) Evitemos participar con una actitud negativa, derrotista, de crítica destructiva (todo está mal hecho, son unos inútiles… “ellos” tienen sus espaldas bien resguardadas.) 

“Porque la pregunta clave al final de este largo y fructífero viaje no será sí se puede ser feliz, sino, si se está dispuesto a serlo.”

Ignacio Lange